CONSEJOS PARA NADAR EN AGUAS EN ABIERTAS

Temporada estival y este año más que nunca, las ganas de practicar deportes al aire libre son infinitas. Nadar en aguas abiertas, sobre todo en el mar, se puede convertir en una de las actividades más gratificantes en estos momentos.

Seas triatleta o no, si te gusta el deporte al aire libre, te invito a que aproveches este otoño para practicar el nado en aguas abiertas. Lo importante es hacerlo con seguridad, de modo que no te pierdas los consejos para nadar en aguas abiertas.

Al margen de las competiciones de triatlón, que este año se han visto prácticamente anuladas, creo que la natación puede convertirse en uno de nuestros aliados este otoño para mantenernos en forma y disfrutar del entorno. Toma nota de estos consejos para nadar en aguas abiertas, y mis materiales imprescindibles, que encontrarás al final del artículo.

La libertad de nadar en mar abierto, es una sensación maravillosa.

Cuando escuchamos el término “aguas abiertas”, es probable que nuestra cabeza evoque imágenes de mar abierto. Sin embargo, también hacemos referencias a otros lugares en donde tenemos grandes masas de agua como embalses o lagos.

DIFICULTADES MÁS COMUNES A LA HORA DE ENFRENTARNOS A LA NATACIÓN EN AGUAS ABIERTAS

En el caso de los triatletas, acostumbrados a entrenar la mayor parte del tiempo en piscina, el segmento de natación puede provocar ciertos temores y tensiones por desconocer el comportamiento de un medio no natural, además de ser un medio cambiante. En la piscina no hay corrientes, hay visibilidad del fondo, entre otras cosas. 

Esos mismos temores, solemos tenernos las primeras veces que nos metemos a nadar en un lago, embalse o mar. El miedo a lo desconocido.

ANTES DE METERNOS AL AGUA

Lo primero que debemos hacer es analizar las condiciones climatológicas y el estado del agua: si hay mareas, si está revuelta, la existencia de corrientes, temperatura del agua y temperatura exterior…

En las zonas donde se practica Surf, es fácil encontrar las Tablas de Mareas y saber cuándo hay Pleamar y Bajamar, y de esa manera tener en cuenta cuándo vas a meterte al agua, evitando los movimientos y corrientes que hay en estos casos. 

Si no sabemos interpretar el mar, o la existencia de corrientes (cosa que a veces se ve por el color del agua), lo mejor es preguntar a los socorristas de las zonas de baño.

Cuanto mejor estudiemos las condiciones y el lugar, menores riesgos correremos.

Una vez tenemos estos puntos claros, pasaríamos a establecer puntos de referencia para cuando estemos dentro del agua.

En muchísimas ocasiones, no somos conscientes de la fuerza de las corrientes y cuando nos queremos dar cuenta, estamos muy alejados de la zona establecida, de la costa y puede resultar complicado situarte dentro del agua.

Por ello, localiza estructuras claras y grandes que sean visibles dentro del agua y fíjalas como tus puntos de referencia y localización. Esto te ayudará a mantener tu zona de nado controlada.

Así mismo, localiza estructuras dentro del agua. Lo más seguro son las Boyas que delimitan las zonas, y pueden servirte de guía en tu trayectoria de nado. Estudia también la salida y entrada del agua. Toma referencias para saber por dónde salir y no encontrarte sorpresas de zonas en las que por el estado accidentado del fondo o situaciones peligrosas (cortes, erizos de mar, piedras resbaladizas, zonas de vegetación en embalses y ríos, etc) pongan en riesgo tu integridad física.

Además, en función de la temperatura del agua y el tiempo que vayamos a permanecer en ella, es recomendable el uso del neopreno para evitar situaciones de hipotermia.

MATERIALES DE SEGURIDAD

No olvidemos que, si somos vistos, nos podrán atender en caso necesario, y a su vez, para embarcaciones grandes, surfistas, etc… también seremos vistos.

Ver y ser vistos es una de las consideraciones más importantes cuantos se trata del nado en aguas abiertas; ya sea en un embalse, lago, en una cala o en mar abierto.

Por lo general, en el agua apenas se nos ve, por eso, es necesario que el material adicional que llevemos sea de un color llamativo, o tenga algo que nonos permita ser vistos.

Los neoprenos de triatlón, en su mayoría son de color muy oscuro y complementarlo con otros accesorios es más que recomendable. El objetivo en este caso es que nos ayuden a mejorar la flotabilidad en el agua, mantener una correcta temperatura corporal y facilitarnos el nado.

Los neoprenos de nado en aguas abiertas cuentan con detalles de colores flúor que facilitan el que seamos vistos.

Por otro lado, siempre es recomendable utilizar un gorro de natación (para nadar más cómodo y proteger también tus oídos), que debemos procurar siempre que sea de un color visible. 

Por último, las gafas. A menos que las condiciones climatológicas sean de un día nublado (y necesitemos unas gafas con cristal claro), para el ando en aguas abiertas, es recomendable llevar siempre gafas con efecto espejo. 

Y el accesorio por excelencia que todo nadador de aguas abiertas, la boya de seguridad. 

Fuente: www.orca.com